La vida de los Santos: El Monje Gregorio Decapolita
Conmemorado el 20 de Noviembre (3 de Diciembre)
El monje Gregorio Decapolita nació en la ciudad isaúrica de la Decápolis en el siglo VIII. Desde su niñez sintió inclinación por el templo de Dios y por los oficios de la Iglesia. Leía constantemente con reverencia la Sagrada Escritura. Para evitar el matrimonio que sus padres habían dispuesto para él, se marchó de su casa en secreto. Pasó toda su vida peregrinando: estuvo en Constantinopla, Roma y Corinto, y llevó vida ascética por un tiempo en el Olimpo.
El monje Gregorio predicó en todas partes la Palabra de Dios, denunciando la herejía iconoclasta, fortaleciendo la fe y la fortaleza de los ortodoxos, a quienes en aquellos días los herejes oprimían, torturaban y encarcelaban. Por su esfuerzo ascético y su oración, san Gregorio recibió los dones de profecía y de hacer milagros. Habiendo alcanzado la pureza de corazón, fue hallado digno de oír el canto de los ángeles en alabanza de la Santa Trinidad. Para poder combatir mejor la herejía iconoclasta, san Gregorio dejó el monasterio de San Minos, donde había llevado vida ascética durante largo tiempo, y partió nuevamente hacia Constantinopla. En la capital, una grave enfermedad minó sus fuerzas, y entregó su espíritu al Señor en el año 816.
Troparion (Tono 4)
Oh Dios de nuestros padres, trata siempre con nosotros según Tu mansedumbre.
No nos prives de Tu misericordia, sino que por sus súplicas dirige nuestra vida en paz.
Kontakion (Tono 3)
La Iglesia te reconoce como un sol radiante con las bellezas de las virtudes, iluminando a todos con rayos de sanaciones, oh favorito de Cristo.
Por ello celebramos tu memoria venerada y honramos tus luchas, oh padre Gregorio, el más bendito y sabio.



